
OKKVLT SESSION 2025
MONTJUIC SE TIÑE DE NEGRO
28.09.25 / Poble Espanyol
Otro año más disfrutamos del OKVLLT SESSION, esta vez en la carpa del Poble Espanyol de Montjuic, formado por cuatro bandas internacionales bastantes exitosas de estos años atrás, y una banda nacional que esta dando mucho que hablar.
El festival empezaba desde temprano, las puertas del recinto abrieron a las 15h. y el ambiente, dominado por sombras y luces tenues, era propicio para que las bandas de corte doom y atmosférico generaran una comunión íntima con el público.
Los encargados de abrir el telón fueron la banda local TODOMAL, el público ya se había reunido con fervor frente al escenario y el humo llenó los bordes del escenario, y los primeros acordes resonaron. El grupo abrió con piezas densas, que combinaban riffs envolventes, pasajes melancólicos y voces cargadas de emoción. La puesta en escena, sobria pero efectiva, reforzó la atmósfera oscura sin caer en excesos visuales.
Con un buen sonido, nos deleitaron con temas como; “High time” con la que iniciaron el show, “Silent mass” o “Infero tristi”.
El cierre del set fue especialmente potente con una de sus canciones más reconocibles “Antichrist of love” que edificó un crescendo que hizo vibrar al público. Al finalizar, un aplauso prolongado acompañó la retirada de la banda.
Setlist TodoMal:
High time Ultracrepidarian Silent mass Gods fucking in the sky Infero Tristi Coalescense Antichrist of love
Turno para la banda procedente de noruega, SYLVAINE que comenzó de forma suave, casi etérea. Con arreglos de sintetizadores pregrabados, capas de guitarras leves y voces que se iban fundiendo unas con otras.
En momentos claves, Kathrine Shepard, vocalista y guitarra de la formación hizo gala de sus gritos desgarradores que sacudían ese clima delicado, recordando que detrás del lirismo hay tensión, oscuridad, contraste.
La selección del repertorio se inclinó hacia su EP “Eg er framand” de 2024, aunque también se dejaron entrever resonancias de trabajos anteriores.
Una vez más la joven nórdica demostró su capacidad como narradora musical. En ocasiones no solo se limitaba a ejecutar, sino también a narrar con su expresión corporal, moviéndose con naturalidad, a mitad de camino entre lo frágil y lo decidido.
La audiencia respondió con reverencia. No hubo un frenesí estridente, pero sí una conexión emocional profunda: aplausos, momentos de reflejo íntimo, la relación artista–público se sintió cercana y respetuosa. Sin lugar a duda banda a la cual seguirle los pasos de cerca.
Setlist Sylvaine:
Nova Earthbound Fortapt I close my eyes so I can see Mono no aware Mørklagt

Para cuando llegó el turno de GAAHLS WYRD, la carpa ya estaba expectante. Muchos sabían la reputación del vocalista Gaahl (ex-Gorgoroth, God Seed) como figura provocadora y enigmática, pero esa noche tenía que sostener su mito en el directo.
Desde el primer instante, el noruego impuso su presencia con una calma autoritaria. No necesitó grandes gestos para marcar territorio; su voz y el aura que lo rodea bastaron para capturar la atención del público. En esta versión de Gaahls Wyrd se aprecia claramente una evolución hacia texturas más ambientales, con influencias que suavizan el filo extremo sin perder la esencia del black metal.
El sonido general fué impecable; pocas, o ninguna, críticas hacia la calidad de la producción. La banda acompañó con contundencia y precisión, logrando que el conjunto no dependiera únicamente del carisma del “vikingo nórdico”.
La actuación incluyó una mezcla de temas del repertorio propio de Gaahls Wyrd, incluyendo material del nuevo álbum “Braiding the stories”, junto con reinterpretaciones de canciones de Gorgoroth o God Seed, dada la costumbre del proyecto de bucear en el pasado del vocalista.
Hubo momentos en los que la iluminación, el humo y la puesta en escena se conjugaron para crear pasajes casi ritualísticos, donde la música parecía levitar entre la penumbra. La conexión con la audiencia se sentía intensa, íntima, como un pacto entre los presentes y el artista.


Hora de CANDLEMASS, el público ya estaba entregado. Johan Längqvist apareció con su clásica chupa de cuero, haciendo gestos teatrales con pasos característicos. Su voz, aunque con los años encima, mantuvo la prestancia esperada para interpretar temas que se han convertido ya en mitos del género.
La banda, por su parte, sonó sólida, con buena combinación entre peso, atmósferas y presencia. El repertorio fue claramente pensado para tocar las fibras sensibles del fan clásico, con temas que atraviesan la era dorada de los suecos y otras etapas veneradas por los seguidores. Temas como “Bewitched”, con la que iniciaron su actuación, “Mirror mirror” o “A sorcerer’s pledge” fueron momentos álgidos del show, con reacciones emotivas del público y fuertes ovaciones. El cierre con “Solitude” fue ciertamente simbólico: un himno que refuerza tanto la melancolía como la grandeza del doom, y una despedida justa para una velada tan extraordinaria.
El concierto de Candlemass fue una experiencia emocional, nostálgica y casi ceremoniosa para quienes llevan décadas siguiendo al grupo.


Había una tensión especial en el aire: MY DYING BRIDE regresaba con una nueva formación vocal, ya que el vocalista clásico Aaron Stainthorpe no estaría presente en los conciertos de 2025, siendo sustituido por Mikko Kotamäki (de Swallow the Sun).
Cuando las luces bajaron y el murmullo del público se convirtió en un silencio expectante, comenzó el viaje.
El repertorio elegido fue una mezcla equilibrada entre clásicos y piezas del más recientes destacando; “She is the dark”, “Like Gods of the sun” o “The cry of mankind”.
La estructura fue cuidadosamente armada para alternar momentos de densidad sonora con pasajes más íntimos, dando al público respiros emotivos en medio de la pesadez doom.
Desde el arranque existió cierta reserva: Kotamäki apareció serio, aferrado al micrófono, midiendo cada palabra. Algunos momentos de su voz se perdieron entre las capas instrumentales más densas, particularmente en fragmentos más solitarios o atmosféricos.
La conexión con el público fue desigual. En los momentos emotivos se palpaba tensión en los ánimos de quienes esperaban una versión más auténtica, mientras que en los momentos de fuerza colectiva tanto músicos como asistentes parecían unirse en un ritual compartido bajo la oscuridad.
Setlist My Dying Bride:
A kiss to remember My hope, the Destroyer Like Gods of the sun The 2nd of three bells From darkest skies The cry of mankind The snow in my hand Feel the misery She is the dark The raven and the rose
Fotos y texto: Manu Carmona







Setlist Gaahls Wyrd:
Ghosts invited
Carving a giant (Gorgoroth cover)
Aldrande tre (God Seed cover)
Awakening remains – Before leaving
Braiding the stories
Time and timeless timeline
Exit - Through carved stones (Gorgoroth cover)
Høyt opp i dypet (Trelldom cover)
Carving the voices
From the spear
Prosperity and beauty (Gorgoroth cover)
Through and past and past
Alt Liv (God Seed cover)



Setlist Candlemass:
Bewitched Dark are the veils of death Mirror mirror Under the oak Dark reflections Demon's gate Sweet evil sun Crystal ball A sorcerer's pledge The well of souls Solitude






